

SIGNIFICADO DE WAKAN
"Wakan" se suele traducir como "el Gran Espíritu" o "el Gran Misterio" entre varios grupos indígenas americanos como el pueblo Lakota, también conocidos por Sioux.
Es la palabra usada para expresar la incomprensibilidad del universo y su gran fuerza.
No se refiere a una deidad personal, sino a una fuerza o poder espiritual que impregna todas las cosas.
Un concepto fundamental considerado como el ente vital que reside en todas las cosas; tienen una conexión profunda con la naturaleza y consideran que los caballos, al igual que otros elementos de su entorno, poseen un espíritu o "Wakan".
En la mayoría de las lenguas indígenas de América, “Wakan” suele vincularse con lo sagrado, lo espiritual o lo venerable.
En Awajún, comunidad indígena de la Amazonía peruana "Wakan" significa "espíritu" o "alma".
En Quechua, en los Andes, "Wakan" se refiere a algo sagrado o venerado: un animal, objeto, lugar, o fenómeno con poder espiritual.
Por lo tanto, el significado de “Wakan” puede variar ligeramente dependiendo del idioma y el contexto cultural, pero se relaciona con algo natural, sagrado, poderoso e imbuido de significado espiritual.
Es el espíritu de la naturaleza, permanente y esencial, que se mantiene a través de los cambios que sufren los seres naturales.
Es la unión entre hombres, caballos y el resto del universo.
El todo indivisible formado por la naturaleza y los hombres, muchas veces tan difícil de entender en nuestro "civilizado" mundo actual.
Continuando con esa tradición y sabiduría ancestral, nuestra relación con los caballos, es una relación de “espíritu con espíritu” que se basa siempre en el respeto y la confianza mutua.
La profunda conexión de la humanidad con los caballos a lo largo de la historia se evidencia en su presencia constante en mitos, arte y cultura, donde se les ha venerado, respetado y asociado con la espiritualidad.
La espiritualidad de los caballos esta arraigada en su simbolismo de libertad, poder, resistencia y fuerza física y espiritual. La espiritualidad no se trata como un concepto esotérico remoto, sino como el conocimiento de nuestra naturaleza animal, es la comprensión de que somos uno con todos los seres, que somos uno con la vida.
Tanto la ciencia como la experiencia nos dicen que es sanador y espiritualmente vivificante simplemente estar en compañía de caballos. Modelan el despertar espiritual en los humanos porque viven constantemente en un estado de presencia, su energía calma el sistema nervioso y ayuda a sincronizar el cuerpo, la mente y el corazón de las personas con el momento presente, simbolizando una profunda conexión con la naturaleza y la importancia de la autenticidad.
